Parafina de tratamiento con coco, especialmente indicada para tratamientos liporeductores, regeneradores, hidratantes y estimulantes del sistema circulatorio.
Cantidad: 3000 ml
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Se utiliza la parafina con coco para tratamientos:
Este producto previo a ser utilizado precisa ser fundido a una temperatura de 52º. Puedes utilizar nuestro calentador de parafina.
1 - También se aplica mediante masaje termo terapéutico, dirigiéndolo hacia los lugares que queremos tratar como: manos, pies, rostro. Ya que por su plasticidad nos permite aplicar el producto por los recovecos que estas zonas presentan y queremos nutrir e hidratar puesto que son las más castigadas y con mayor desgaste.
2 - Este producto también está indicado para su aplicación previa al uso de otros cosméticos, ya que es un vasodilatador que permite el acceso a los poros de la piel tanto de principios activos propios (derivados del coco), como de otros productos aplicados posteriormente.
Para aplicar la parafina, la zona a tratar debe estar muy limpia y desinfectada, y es recomendable aplicar una crema humectante al finalizar el tratamiento.
La parafina debe ser calentada en un calentador de parafina apropiado a temperatura elevada, entre 45 y 55 grados. Después se aplica la parafina, pudiéndose aplicar de dos modos:
Aplicada la parafina, se cubre la zona con una sustancia aislante, papel film o plástico, además de toallas o guantes para mantener el calor. Es importante que el cliente no se mueva para evitar que la parafina se rompa.
Pasados unos quince minutos, se retiran los envoltorios y la parafina con sumo cuidado.
Para tratamientos reductores, se aplica la parafina líquida sobre la zona a tratar a una temperatura cálida y se acompaña la aplicación con un masaje para activar la circulación. Después se aplican mantas térmicas para estimular la transpiración y la eliminación de toxinas. A continuación, se retira la parafina y se aplica frío para provocar una vasoconstricción y se termina el tratamiento con la aplicación de una crema reductora.
En los tratamientos faciales, realizados siempre por un profesional, se aplica la parafina con un pincel o brochita sobre una gasa que facilitará su posterior retirada. Se aplican tantas capas como sean necesarias para conseguir la consistencia adecuada, y pasados unos veinte minutos, la cubierta dura resultante se separa del rostro.
Después de un tratamiento con parafina, la piel aparece más suave, más tersa y luce un mejor aspecto.