¿Qué es la piel escamosa y cómo cuidarla?

¿Alguna vez has notado que tu piel se siente tirante y áspera? Esa sensación puede ser causada por la piel escamosa. A menudo, aparece sin previo aviso y genera incomodidad tanto física como estética. En este artículo, te desvelaremos los secretos para recuperar la suavidad y luminosidad de tu cutis.

¿Qué es la piel escamosa?

La piel escamosa es un problema común que se produce cuando la capa externa de la dermis, llamada epidermis, pierde humedad. Esto hace que las células muertas se acumulen en la superficie, dando lugar a esa apariencia escamosa y áspera.

Estas escamas pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, aunque son más comunes en áreas como los codos, rodillas, cuero cabelludo y rostro.

Causas comunes de la piel escamosa

Existen múltiples factores que pueden provocar este problema cutáneo. Entre ellos destacan:

  • · Climatología: El aire seco y las bajas temperaturas pueden provocar sequedad.
  • · Afecciones dermatológicas: Como la dermatitis, psoriasis o eccemas pueden desencadenar la aparición de piel escamosa.
  • · Uso excesivo de productos agresivos: Jabones fuertes o productos de cuidado personal con ingredientes irritantes pueden llegar a dañar la barrera cutánea.
  • · Deficiencias nutricionales: La falta de ciertas vitaminas y minerales, como las vitaminas A y E, también afectan a la salud de nuestro cutis.
  • · Deshidratación: Debemos mantener una buena hidratación tanto interna, bebiendo abundante agua, como externa, aportando los nutrientes necesarios.
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Cómo cuidar la piel escamosa: una guía paso a paso

El cuidado de este tipo de tez requiere una combinación de buenos hábitos y productos adecuados. ¿Quieres saber una rutina para piel escamosa? ¡Aquí la tienes!

1. Usa productos adecuados

La primera parte del cuidado comienza en la ducha. Si tienes este tipo de cutis, hay que poner mucha atención a cómo son nuestras duchas y baños. Lo más recomendable es evitar el agua caliente, es mejor usar agua tibia y limpiadores suaves, sin sulfatos. Así como, secar el cuerpo o las zonas dañadas con toques suaves para no empeorar el problema.

2. Hidratación, hidratación y más hidratación

Es fundamental y muy importante aplicar una crema hidratante después de la ducha. Te recomendamos optar por productos que contengan ingredientes como el ácido hialurónico, que retiene la humedad de la piel; la glicerina, que atrae el agua a la superficie de la dermis; o las ceramidas, que refuerzan la barrera cutánea.

3. Exfoliación suave

Con la exfoliación se eliminan las células muertas, pero debe hacerse con precaución. Usa un exfoliante suave una o dos veces por semana para evitar irritaciones. Opta por productos que exfolien de manera efectiva sin dañar la barrera cutánea, como pueden ser mascarillas exfoliantes.

4. Protección solar diaria

La protección solar es imprescindible para cualquiera, pero especialmente para la piel escamosa. El daño solar puede empeorar la sequedad y contribuir a la aparición de más escamas. Te recomendamos utilizar un protector solar de amplio espectro con un SPF de al menos 50, incluso en días nublados.

5. Alimentación saludable

Llevar una alimentación saludable también influye en la salud y el estado de nuestro cutis. Por eso, es primordial incluir en tu día a día una dieta con alimentos ricos en vitaminas y antioxidantes que aporten nutrientes a todo tu organismo.

6. Humidificadores en el hogar

Los humidificadores pueden ser un gran aliado para este problema cutáneo, especialmente si vives en un clima seco, o durante el invierno. Estos dispositivos aumentan la humedad del aire en interiores, lo que ayuda a mantener la piel hidratada.

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¿Qué hacer si la piel escamosa no mejora?

Si después de seguir una rutina de cuidado adecuada no ves mejoras, es recomendable consultar con un dermatólogo. Puede ser un síntoma de una condición médica subyacente que requiere tratamiento especializado. Un profesional podrá realizar un diagnóstico preciso y recomendar productos o medicamentos específicos para tu caso.

Preguntas frecuentes (FAQs)

1. ¿La piel escamosa es contagiosa?

No, no es contagiosa. Es un síntoma de sequedad o de afecciones dermatológicas que no se transmiten de persona a persona.

2. ¿Puedo maquillarme si tengo la dermis escamosa?

Sí, puedes maquillarte, pero es importante prepararla bien antes de aplicar el maquillaje. Usa una buena crema hidratante y considera aplicar una prebase para asegurar un acabado uniforme y evitar que el maquillaje resalte las escamas.

3. ¿Cuánto tiempo tarda en mejorar?

El tiempo de recuperación varía dependiendo de la causa y de la rutina de cuidado. En general, siguiendo un tratamiento adecuado, deberías notar mejoras en unas pocas semanas.

4. ¿Puedo usar aceites para hidratar la piel escamosa?

Sí, los aceites naturales como el aceite de almendras o el aceite de coco pueden ser muy beneficiosos.


En definitiva, la piel escamosa puede ser un desafío, pero con el cuidado adecuado y la selección de productos específicos, es posible restaurar la suavidad y salud del cutis. Recuerda mantener una buena hidratación, protegerte del sol y evitar productos agresivos.

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