Hay muchos factores que hacen que nuestra piel envejezca prematuramente. Un 25% de este proceso es provocado por la genética, pero todavía nos queda un 75% que podemos controlar.
ALIMÉNTATE BIEN
Evita el consumo de azúcar, afecta muy negativamente a nuestra salud y también a la de nuestra piel. Al entrar al corriente sanguíneo, ataca al colágeno y la elastina, proteínas responsables de mantener la elasticidad y firmeza de nuestra piel.
Trata de no consumir carbohidratos simples como los que contienen los refrescos, el arroz y pan blancos,… se convierten en azúcar en cuanto entran en nuestro organismo.
Si te apetece un dulce puedes comer un trocito de chocolate negro, que además es un potente antioxidante y te ayudará a combatir el daño causado por los radicales libres.
Come alimentos ricos en vitamina C, te ayudará a generar colágeno.
Toma suplementos alimenticios si es necesario.
USA COSMÉTICOS FACIALES
Las cremas, sérums y mascarillas faciales no son un lujo, sino una necesidad si queremos que nuestra piel esté realmente nutrida. Cuanto más jóvenes empecemos a usarlas, mejor.
DUERME BIEN
Dormir es la mejor forma de oxigenar la piel para revertir los daños causados por los radiceales libres durante el día. Cuando el sueño se reduce, el cutis se resiente.
Durante el descanso es cuando regeneramos los tejidos y células.
COMBATE EL ESTRÉS
Al estar estresado o bajo presión, el cuerpo produce la hormona cortisol, que daña el colágeno y la elastina.
Deja el trabajo en la oficina y en casa disfruta de tu familia y tus hobbies. Participar en actividades que nos gustan ayuda a reducir el estrés.
HAZ EJERCICIO
El ejercicio regular ayuda a oxigenar la piel y al sudar eliminamos toxinas.
Además, practicar ejercicio también ayuda a reducir el estrés.
LIMPIA Y MIMA LA PIEL
Limpia la piel del rostro dos veces al día, por la mañana y por la noche, para liberar la piel y los poros del cualquier tipo de suciedad y contaminación a la que hayamos estado expuestos.
PROTÉGETE DEL SOL
Usa protección solar a diario. Muchas cremas de días la llevan incorporada en su formulación. El sol es uno de los factores que pasan más factura a nuestra piel.