¿Te gustaría poder tener una manicura que durara más de cuatro días? Si es así, entonces el barniz semipermanente es todo lo que necesitas. Sin embargo, ¿sabes exactamente qué es y cómo funciona el proceso de manicura semipermanente?
Más allá de que puedes elegir el esmalte gel que más te guste para tus uñas, la manicura semipermanente te permite lucir unas uñas impecables.
¿Qué es y cómo funciona el proceso de manicura semipermanente?
En el campo del esmalte de uñas, el proceso de manicura semipermanente es un gran avance. Ha revolucionado la vida de las mujeres que aman las manos impecables al ahorrar tiempo, luciendo uñas saludables y brillosas.
La manicura semipermanente se aplica de la misma forma que el esmalte de uñas normal, con el beneficio añadido de que se seca rápidamente. La catálisis del esmalte es el proceso de curar cada capa de barniz en 30 segundos bajo luces LED. También se puede curar cada capa con 2 minutos bajo lámparas UV.
En términos de aplicación, un esmalte tradicional se diluye con un solvente, mientras que en una manicura semipermanente, el esmalte se desprende y se quita en virutas mediante un solvente especializado. Dicho solvente es más o menos rico en acetona.
Además, los esmaltes empleados en la manicura semipermanente incluyen polímeros. Estas son moléculas sintéticas o naturales que se adhieren entre sí y crean una red sólida cuando se exponen a la luz de lámparas LED o UV.
Los acrilatos sintéticos se usan comúnmente, sin embargo, también se usa goma laca, una resina natural generada por las cochinillas. Por su parte, los agentes filmógenos, en su mayoría sintéticos, permiten aplicar el esmalte en capas de manera uniforme.
En el caso de los pigmentos, ya sean fabricados o naturales, están ahí para darle color a tus uñas. Como resultado, un buen esmalte de manicura semipermanente cubre bien y tiene una alta concentración de pigmento.