El aceite de almendras en un excelente aliado para la belleza, se puede utilizar todo el año después de baño o ducha, como agente hidratante, nutriendo la piel, proporcionándole la grasa justa y erriqueciendola con minerales, vitaminas, encimas, oligoelementos, todo ello de origen natural.
También es un excelente vehículo para los aceites esenciales, que uniendo este con las esencias se crea un cosmético personalizado y adaptado a las necesidades estéticas y personales de cada uno.
El aceite de pomelo es un aceite de gran poder cosmético, con una gran carga de vitamina C y A es un potente antioxidante, que mejora la función del colágeno, pero donde realmente está dando unos resultados increíbles es en el tratamiento de la celulitis, ayuda a eliminar toxinas, es liporeductor, evita la retención de líquidos y combate los radicales libres.
Añadir de 10 a 15 gotas de aceite de pomelo en 100 gramos de aceite de almendras dulces, esta mezcla la utilizaremos para masajear las piernas, no solo la zona con celulitis si no toda la pierna, en las zonas más problemáticas pondremos un poco más de aceite e intensificaremos el masaje.
El masaje se realizara a pequeños círculos desde el tobillo a los glúteos y en cartucheras, cara interior de las piernas (rodilla también) y glúteos intensificaremos el masaje.
Esta operación la realizaremos mañana y noche durante uno o dos meses y luego solamente una vez al día, como es totalmente natural, sí queremos utilizar este aceite en todo el cuerpo, podemos aunque solamente tengamos celulitis en las piernas, lo que si haremos será el masaje en ellas.
Los aceites tanto esenciales como los base, son los mejores aliados para este tipo de tratamientos ya que sus moléculas son más pequeñas que las de las cremas y penetran mejor y luego al realizar el masaje produce un aumento del calor corporal que dilata los poros y permite una absorción mucho mejor y más profunda de los principios activos que tienen esos aceites.
